:quality(75)/author-service-images-prod-us-east-1.publishing.aws.arc.pub/elcomercio/ce7c5e8c-13e9-42a9-a2a8-95423860a90a.jpg "Foto de Renzo Rodriguez")
Este era el partido bisagra, el partido que nos podía levantar en todo sentido, dejar el último lugar de las Selección Peruana sigue siendo un mar de dudas y dejamos escapar dos puntos en casa. Un resultado que a la larga podemos lamentar y que grafica nuestra realidad: décimos de las clasificataorias con solo dos puntos de 18 posibles.
El equipo de Juan Reynoso empezó bien el partido, tuvo otra actitud, de la mano de Piero Quispe, pidiendo el balón, buscando la asociación con Joao Grimaldo. Tal es así que a los 17′, el ‘Picante’ trianguló con Gianluca Lapadula, y sacó un centro envenado para Yoshimar Yotún, quien de cabeza nos hizo gritar el primer gol en estas Eliminatorias. Parecía que esta era nuestro partido, pero en el segundo tiempo, la ‘Vinotino’ salió con otra personalidad y nosotros decaímos. A los 54′, una marca pasiva de Marcos López le dio pase libre a Machís para asistir a Savarino. Los cambios no ayudaron, fuimos una ‘sele’ partida, terminamos sin ideas y mostrando nuevamente nuestra peor versión.
Claves del partido
Error que nos afectó
El puesto de lateral izquierdo sigue un problema en la selección. Con un Miguel Trauco fuera de su mejor forma física, Marcos López tuvo la responsabilidad de cubrir esa zona. Sin embargo, el jugador del Feyenoord mostró, una vez más, un nivel muy por debajo del esperado. Por esa banda, las vio cuadras con Darwin Machís, no solo porque cayó en su juego de ganarse una tarjeta amarilla muy temprano, sino porque fue responsable directo de dejarlo pisar al área para el empate.
López tuvo una marca pasiva frente a Marchís, no lo cerró a tiempo y el venezolano se coló en el área por la izquierda y asistió a Savarino, quien se quitó de la marca de Piero Quispe, para el empate en el arranque del segundo tiempo. Tras ello, el lateral del Feyenoord sintió la presión y el nerviosismo mismo por el 1-1 y fue por donde más atacó la ‘Vinotinto’.
Lo gritamos todos
Durante la primera media hora, el equipo peruano se adueñó de la pelota y con justicia estaba por delante del marcador. La selección jugaba al ritmo de Quispe, pero sobre todo de Yoshimar Yotún, quien terminó siendo nuestro mejor jugador. ‘Yoshi’ pisó el área al ver la jugada de Grimaldo con Lapadula y terminó convirtiendo de cabeza, logrando el primer tanto de Perú en estas Eliminatorias.
Luego del gol, la ‘sele’ tuvo minutos para incluso ampliar el marcador, pero ya tras el descanso, el desgaste nos pasó factura y pese a todo ‘Yoshi’ siguió siendo de lo más destacado, jugando incluso hasta de lateral. Pese al resultado, el capitán rimense cumplió 128 partidos con la bicolor siendo uno de los dos futbolistas con más partidos disputados con la blanquirroja, igualando a Roberto Palacios.
Cambios que no ayudaron
El aspecto físico nos pasó factura. En el primer tiempo, Grimaldo, Quispe y Reyna intentaron por donde pudieron, pero solo aguantaron una hora. Tras ello, Reynoso empezó a mover el banco para refrescar el equipo con nombres importantes, pero no estuvieron a la altura y se terminó mucho peor de lo que se arrancó, con André Carrillo, Edison Flores, Paolo Guerrero, piezas fundamentales en el pasado.
A los 55′, Edison Flores entró por Reyna y diez minutos más tarde, sacó a Grimaldo por Franco Zanellato y André Carrillo por Quispe. Ni ‘Orejas’, ni el propio ‘Bicho’ pudieron cambiarle la cara a Perú y sobre todo la ‘Culebra’, quien entró a la cancha con una actitud discutida, se le vio trotón en el campo y fuera de ritmo. Y ya faltando seis minutos (84′), Reynoso recién puso a Paolo por López y Cartagena por Aquino. De paso, la gente se quedó sin poder ver el debut de Oliver Sonne, tendrá que esperar.
No hubo buen replanteo
Reynoso paró un 4-3-3, que por momentos también parecía un 4-2-3-1. El equipo respondió hasta donde pudo en el tema físico, pero después de los cambios, el técnico nacional se animó a replantear el partido y colocar un 4-4-2 sobre el final, con Guerrero y Lapadula en el ataque. Sin embargo, más allá de formaciones, en el segundo tiempo, nos vimos como un equipo partido y el cambio de Quispe se sintió.
Carrillo no asumió el rol de pedir el balón y con un 4-4-2, nos vimos largos, sin conexión en el mediocampo. Poner a dos delanteros sin un enganche no fue la mejor elección. Desde la pizarra, Fernando Batista le ganó el esquema a Reynoso, manteniendo un orden y cuidando el resultado tras el 1-1.
No aprovechó su momento
El clamor popular en su momento fue pedir a Piero Quispe. Reynoso escuchó y lo puso de arranque ante Bolivia, repitió lo mismo contra Venezuela y no desentonó. Sin embargo, el caso de Bryan Reyna era diferente. El extremo de Alianza Lima había mostrado buenas sensaciones cuando le había tocado entrar, por lo que el público lo pedía desde el arranque, y ante los ruegos, el técnico lo puso desde el vamos.
No obstante, no aprovechó el momento y Reyna fue uno de los jugadores que más decepcionó. Intentó desequilibrar, pero se quedó sin ideas y tras el descanso su físico estuvo mermado. Reynoso le dio un par de minutos más, pero tras ello, lo cambió por Edison Flores y mostró su malestar al ser sustituido.
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Bachiller en Ciencias y Artes de la Comunicación con mención en Periodismo por la Pontificia Universidad Católica del Perú, con estudios en Gestión Deportiva en Evolución Conmebol y Marketing Digital. Tiene más de cinco años de experiencia en periodismo digital, escrito y multimedia.